LA FAMILIA, LA ESCUELA, LA TV, LOS VIDEOS JUEGOS, LA VIOLENCIA
LA FAMILIA, LA ESCUELA, LA TV, LOS VIDEOS JUEGOS, LA VIOLENCIA
NIÑOS Y LA TELE NIÑOS Y LOS VIDEOS JUEGOS
El cuidado y educación de los niños es una de las pocas funciones básicas que conservó la familia hasta la década del 70. a partir de esa fecha la educación y socialización de niños y adolescentes ha corrido a cargo de distintos agentes sociales, pero sobre todo, de un agente invisible e intangible: La Televisión, los videos juegos, Internet, juguetes bélicos.
Puede decirse que la familia ha perdido el control, en gran parte, de la educación y socialización de los hijos. La escuela por una parte y la televisión por otra, la han sustituido sin que nada, o casi nada, pudiera hacerse para evitarlo.
Sin embargo, hoy, cuando la violencia, el fracaso escolar, las drogas, el desinterés por las con significados trascendentales, no materiales, le son indiferentes a gran parte de la juventud, se le reprocha a la familia el no haber cumplido con la función que la sociedad, desde el origen de los tiempos, le han encomendado.
Como consecuencia de la ola de violencia desatada en las escuelas, sociólogos y psicólogos del mundo se preguntan por la raíz de los grandes problemas que afectan a los jóvenes ¿por qué tanta violencia? ¿ a que se debe el aumento de los actos criminales por parte de menores?.
Hay repuestas para todo los gustos, pero todas se dirigen hacía la falta de cumplimiento por parte de la familia de sus funciones. Incluso del fracaso escolar, el consumo de drogas,( alcohol, tabaquismo, estupefacientes etc,) y los abusos sexuales entre menores, esto apunta al incumplimiento familiar de sus obligaciones sociales.
Si la familia se ocupara más de los hijos y no le permitiera ciertos caprichos (video juegos, Internet, Televisión, algunos programas, como (Tinelli) por nombrar algunos, erradicar los juguetes bélicos, los chicos no interiorizarían valores NEGATIVOS. Sabrían diferenciar entre el bien y el mal. ¿pero cuáles son los valores positivo que ofrece la sociedad a los adolescentes que le ofrecemos nosotros los adultos?.
¿puede la familia competir con los monstruos del mercado de la publicidad directa e indirectamente, medios de comunicación que, no tienen sentido educativo, como orales, valores que se venden como paradigma de progreso, civilización y desarrollo psicológico. Cultural,? ¿qué instrumentos ofrece la sociedad a la familia para combatir la violencia infantil y juvenil que hoy se vive?, son preguntas que requieren repuestas.
Hoy la familia moderna puede hacer digamos que muy poco contra los valores hedonistas y de la competitividad que permiten los medios de comunicación, tanto visuales gráficos
La conducta de los niños e incluso de los individuos al llegar a la edad adulta, depende de que como la familia haya educado a sus hijos. La violencia precede de la falla en la educación primaria el hogar.
Sin embargo, es precisamente en ese estadio donde más actos de violencia se están detectando y donde es mayor el malestar de los educadores por la falta de criterios claros y definidos sobre los valores a inculcar en los niños.
¿Qué puede hacer el estado y la familia para frenar los brotes de violencia que están surgiendo en la escuela, en las calles, hogares? Censurar los contenidos de la televisión, los videos juegos, Internet, llenar de contenido prácticos los programas educativos.
hay que buscar solución al problema teniendo bien presente, cuando un niño nace no sabe jugar, estudiar, pensar, querer a los demás, prestar atención, caminar, comer, hablar e interpretar los códigos normativos son actos aprehendidos.
Las habilidades y conductas, así como la inmensa mayoría de las actitudes que el niño manifiesta. Las ha ido aprehendiendo a lo largo de los día y de los años a través de múltiples agentes sociales. La familia y la escuela son importantes, pero no lo más impactante en la configuración mental del niño.
Esta demostrado que las rabietas, agresiones, peleas, miedo, timidez, problemas con la comida y, la mayoría de los trastornos de conducta que los niños presenta durante el desarrollo de su personalidad.
En ese aprendizaje intervienen directamente los PADRES también los maestros, pero sobre todo esto la televisión la cual el niño tiene más acceso y es la cual tenemos encendida en forma permanente, también los amigos del barrio, la mayoría de las cosas que un niño hace y piensa responde a conducta aprendidas mediante la observación, muchas veces inconscientes.
De ahí que para comprender a los niños hay que tener mucha paciencia y perseverancia y prevenir sus problemas y conflictos internos, sea de vital importancia que sepamos como aprenden sus conductas y cómo y como hacer frente a los problema que manifiestan en los primeros estadios del ciclo de vida. Solo así sabremos como cambiarlas.
Para conseguirlo quizás tengamos también que cambiar algunos hábitos y modo de explicar la conducta de los chicos. Por ejemplo desterrar de nuestro vocabulario expresiones como: “a este hico no hay con que pararlo, no hay quien lo entienda...son incorregibles, no se que voy hacer con ustedes”, mi hijo el mayor estudia muchísimo , sale del él por nosotros no le decimos nada, pero el pequeño en cambio, nos ha salido torcido.
Es decir, el recurso al destino y la herencia, tales como: “ cuando le da, le da”, “ no hay nada que hacer con este chico”, son expresiones que fomentan actitudes fatalistas, de desconcierto y de desánimo en el niño.
Hay que evitar pronunciarlas incluso cuando sabemos que el niño no nos esta escuchando.
Con este tipo de expresiones el niño acaba pesando de si mismo que es INCORREGIBLE, que ha nacido torcido y que, haga lo que haga, nunca podrá ser como manda la sociedad o quieren sus padres que sea.
La violencia puede ser una válvula de escape a la presión social o una salida a los reclamos a los medios de comunicación (todos en general) que le dicen al niño que el mundo esta al alcance de sus manos y que solo necesita volar para poder alcanzarlo,
Sólo los más tontos no pueden acceder a los bienes que ofrece la sociedad de consumo. Pero si son listos, aunque un poco tontos, encontraran la forma de alcanzar la bici o el auto de sus sueños. En estas condiciones es poco probable que el niño desee cambiar y menos aún que sepa como hacerlo.
Por ello debemos evitar (Padres maestros) eviten colocar etiquetas a los niños frases como: Es muy antipático, es malo, es un irresponsables, neurótico, egoísta, esta mal de la cabeza. No debe pronunciarse nunca.
Hay que huir de esta expresiones por que son vagas e imprecisas y, además, no nos permiten comprender con claridad lo que se quiere decir respecto al niño. Por otra parte, se prestan a multitud de interpretaciones diferentes.
Por ello lo general constituyen generalizaciones incorrectas e injustas que pueden llevar al niño a perder su auto estima, o por el contrario a sobre valorar sus actitudes o cualidades. Lo por y más grave de las etiquetas del recurso al destino y a la herencia es que tienden a ver la conducta de los niños como una cuestión personal, individual interna del niño, cuando están demostrando que intervienen múltiples factores medioambientales.
HERIBERTO MONTIEL